¿Es posible el buen diseño interior con recursos de segunda mano?
Restaurar objetos encontrados es toda una experiencia: hobby para algunos, profesión para otros; lo cierto es que, con un giro de tuerca cualquier artilugio usado puede convertirse en un mueble de singular belleza.
Con las nuevas tendencias y políticas de uso de desechos en ciertos aspectos de nuestra vida diaria, como las compras en el súper mercado, el reciclaje también supo encontrar un hueco en la arquitectura y la decoración. Cada vez más negocios y emprendimientos pequeños y medianos incorporan muebles restaurados, objetos utilitarios y decorativos rescatados a sus locales dotando de un ambiente particular a sus establecimientos. Resulta muy llamativo ingresar a un negocio de barrio y ver una antigua máquina de coser adaptada como mesa, botellas de whisky recicladas como lámparas y algunas otras curiosidades que captan nuestra atención. Lo cierto es que las posibilidades de mueblería con piezas desechadas y recuperadas son muchas además de aligerar la carga de desperdicios es un alivio para el medio ambiente.
Revivir objetos desechados también es aplicable a la arquitectura y la decoración de interiores. Movimientos como el DIY (Do It Yourself / Hazlo tú mismo) y el Estilo Industrial son ejemplos notables que van ganando cada vez más popularidad.
Movimiento DIY (Hazlo tú mismo)

¿Tienes una botella de whisky que ya no utilizas? Conviértela en una lámpara.
Usa tu imaginación para crear y recrear algo nuevo, incluso un mueble de varios años puede convertirse en uno nuevo con la restauración adecuada.
Estilo Industrial (Decoración de interiores)

Minimalismo, limpieza y una mezcla de moderno y clásico definen este estilo. Materiales neutros y espacios amplios se suman a la lista. Este estilo es ideal si se quiere conservar el aspecto original de una construcción añadiendo accesorios modernos y técnicas de construcción de vanguardia.